¿Cómo sabemos si lo entendieron? Preguntas en comprensión de lectura que los padres pueden hacer a los hijos
Si el niño o niña ya lee con soltura, puede leer la historia de manera independiente. Si el niño/niña aún lee con dificultad, la podemos leer juntos en voz alta; también podemos suplir las palabras más difíciles. Esto es lo que se conoce como mecánica de la lectura, una destreza diferente pero relacionada a la comprensión de la lectura. Al completar la lectura, independientemente o asistido, entonces discutimos las preguntas de la lista con el niño o niña. La contestación del niño a estas preguntas nos dará una buena medida de lo que comprendió o entendió.
- ¿Dónde ocurre esta historia (escenario)?
- ¿De quién trata esta historia (personaje principal)? Dime más sobre él/ella.
- ¿Qué palabras usarías para describir al personaje principal? (Podemos dar ejemplos o el niño puede seleccionar entre palabras que le proponemos. Esto es importante para que el niño desarrolle su vocabulario).
- ¿Te gustó el personaje principal? ¿Qué te gustó? ¿Qué no te gustó? (Dando opiniones).
- ¿Cuál era el problema en esta historia? ¿Cómo ese problema afectaba al personaje principal? (Problema).
- ¿Cómo se resolvió ese problema en la historia? (Solución).
- ¿Cuál fue la parte más graciosa/interesante/triste/tenebrosa (escoger una o más) en esta historia? Léeme un pedacito de esa parte. (Para obtener reacciones personales).
- ¿Te gustó esta historia? ¿Qué te gustó más? ¿Qué te gustó menos? (Para dar opiniones).
- ¿Conoces a alguna persona que es como los personajes en esta historia? ¿En qué manera es igual? ¿En qué manera es diferente? (Para aprender a identificar similaridades y diferencias).
- ¿Hay algo en esta historia que te haya pasado a ti? Cuéntame sobre eso. (Conectando con la historia).
- ¿Quién está contando esta historia? ¿Hay un narrador en esta historia? (Punto de vista o perspectiva).
- ¿Por qué tú crees que el autor escogió este título para esta historia? ¿Cómo su título se relaciona con la historia? (Título).
- ¿Te gustaría ser un personaje en esta historia? ¿Cuál? ¿Por qué escogiste este personaje?
- ¿Tú crees que esta historia pueda ser cierta? ¿Por qué sí o por qué no?
- ¿Le recomendarías esta historia a un amigo? ¿Cuál sería tu recomendación?
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Educación > Autoayuda > Disciplina > Emociones del niño
RET: La fórmula para educar niños emocionalmente inteligentes
Una guía psicoeducativa para padres y maestros
Sinopsis:
Un informativo viaje dentro del fascinante mundo emocional del niño para entender los pensamientos y sentimientos que, de manera negativa o positiva, influencian su comportamiento. Aplicando los principios RET (pienso — siento — actúo), nuestros niños aprenden a superar los retos de sus situaciones personales difíciles, manejando mejor su mundo emocional.
Descripción larga:
«RET: La fórmula para educar niños emocionalmente inteligentes» de Carmen Y. Reyes es una innovadora guía psicoeducativa para padres, maestros y otros profesionales al servicio de los niños. Por décadas, los maestros y personal auxiliar sirviendo a niños con necesidades especiales han usado intervenciones cognitivas-emotivas para ayudar a niños crónicamente disruptivos, en particular, niños con problemas de coraje recurrente y niños agresivos. Siguiendo un sistema de regulación emocional conocido como «Modelo ABC de las Emociones», los niños estresados aprenden cómo su conducta agitada en el punto C (la consecuencia) no es una reacción a lo que les pasó en el punto A (el antecedente), sino una reacción a lo que ocurrió en el punto B (el punto de sus creencias o beliefs en inglés); o lo que es lo mismo, la conducta alborotada del niño en C es una reacción a B; o sea, una respuesta a su creencia o a lo que el niño está pensando y creyendo sobre lo que le pasó. Más específicamente, los sentimientos de coraje del niño y sus conductas agresivas son consecuencia directa de ambos: (a) sus pensamientos negativos acerca de lo que le pasó y (b) su habla privada o personal negativa (las cosas negativas y pesimistas que el niño se está diciendo a sí mismo). Influenciándose mutuamente, los pensamientos negativos y su habla privada pesimista son creados y repetidos hasta la saciedad en la mente del niño en su punto emocional B, o en el nivel de sus creencias. Central a la filosofía RET está la premisa de que las cosas que nos pasan (los eventos) no son ni buenos ni malos; ni positivos ni negativos. Por lo tanto, los eventos no nos influencian; tampoco determinan nuestra conducta o las cosas que hacemos. Lo que verdaderamente nos influencia a comportarnos como lo hacemos es nuestra percepción e interpretación personal de A (del evento). Por ejemplo, al percibir el evento como «horrible y espantoso; una pesadilla», el niño «le pega una etiqueta negativa» a ese evento (el evento fue «humillante» para el niño), y entonces, el niño reacciona a su etiqueta (humillado y en actitud vengativa), en lugar de responder objetivamente al evento actual. Si pensamos esto más detenidamente, podemos darnos cuenta de que en esta premisa RET existe una poderosa idea: Nuestras emociones, positivas y negativas, no ramifican de nuestro medioambiente o de las cosas que nos pasan, sino de lo que pensamos y creemos acerca de las cosas que nos pasan. Esto conduce directamente a un segundo postulado, quizás más empoderante que el anterior: Todos tenemos un alto grado de control sobre la manera en que nos comportamos y sobre nuestra conducta en general. Si no nos gusta la forma en que nos estamos sintiendo (o comportando) en relación a un evento, todo lo que tenemos que hacer es cambiar la manera en que estamos pensando en relación a ese evento. En esta informativa guía en educación emocional, la autora detalla el procedimiento RET para niños, presentando intervenciones especialmente diseñadas para ayudar a los niños a tomar el mando de sus sentimientos, lo cual, por extensión, los ayuda a asumir sus responsabilidades personales y a reclamar el control sobre su propia conducta. El modelo RET y sus procedimientos son apropiados para manejar niños con problemas de coraje, con déficits en destrezas sociales/pobres interacciones, o simplemente para ayudar a niños con conductas típicas, pero que están batallando contra las preocupaciones y pesares inherentes a su crecimiento mental y emocional.
Tópicos desarrollados en esta guía:
Autocontrol
Autodisciplina
Autoeficacia
Autoestima del niño
Autoimagen del niño
Autonomía y responsabilidad
Pesimismo/Optimismo
Dando apoyo emocional al niño
Niños estresados
Manejo del coraje
Conducta del niño
Emociones del niño
Inteligencia emocional
Pensamiento y razonamiento crítico
6x9/122 págs
En formatos impreso y digital
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7.20 Edición Digital/14.40 Edición impresa (Euros)
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